lunes, 22 de agosto de 2016

"THE GET DOWN" (2016) - SERIES







El teatro está lleno. Un telón de terciopelo rojo preside a los espectadores. Tanto el patio de butacas como cada uno de los palcos están ocupados por almas de distinta raza y condición, tan solo tienen en común unos ojos que aguardan expectantes. Entonces las luces se apagan. Se hace el silencio. No se oye respiración alguna. Un par de focos se encienden con un sonido similar al de una máquina que despierta tras pasar un tiempo aletargada y apuntan hacia el telón. Este ya no es rojo, ha cambiado. Su tela está repleta de grafitis callejeros amontonados unos sobre otros. Un espectador anónimo le susurra a su mujer sentada junto a él: “Han debido cambiarlo en mitad de la oscuridad, nadie se ha dado cuenta, increíble…tan solo han necesitado unos segundos”…Baz Luhrmann, autor de la obra y sentado al lado de este señor esboza una pícara sonrisa.

Entonces la cortina que marca la frontera entre lo real y la fantasía se levanta…
Y comienza la representación…










Nueva York, 1996.

Panorámica de la Estatua de la Libertad.
Comienza a sonar un ritmo hip hop mientras la vista aérea se centra en el Madison Square Garden. Entramos en el pabellón y el primer plano de un pase de backstage, colgado de la solapa de la chaqueta de un tipo, nos informa que la actuación de esa noche corre a cargo de un tal "Mr. Books". Vemos al público, miles de personas, saltando al compás de la música. Sobre el escenario un hombre negro es iluminado por focos de luz blanca. Está de espaldas a los espectadores y oculta el rostro con la capucha de su cazadora y unas gafas de sol…
Entonces se vuelve y comienza a "rapear":

“Soy de la ciudad, sí,
me bautizó la ciudad, si, el barrio más peligroso,
echemos la vista atrás, retrocedamos en el tiempo.

1977, el crimen estaba en auge. El presidente se olvidó de nosotros, nos envió a seis genios. Seis hombres muy poderosos hicieron pasar a Nueva York por una época muy difícil.
Los ricos, los más egoístas, se alimentan de los pobres.

¿Y qué barrio sufrió más? El Bronx. Teníamos que enfrentarnos a nuestros rivales entre escombros, mientras los edificios a nuestro alrededor se derrumbaban. Mi sueño era correcto, pero parecía que solo había problemas. Veía la luz, estaba justo ahí, al final del túnel.


Tenía que encontrar mi cuerda para salir porque necesitaba algo de esperanza que me llenara hasta que un día conocí a un tipo y me acogió bajo su manto.
Habría muerto si ese hombre no hubiera intervenido.
Era un huérfano, mi salvador.
Un espíritu libre, no había hombre más valiente que él.
Era sincero y tenía un don.
Su nombre era "Shaolin Fantastic", un romántico empedernido.

Jamás olvidaré el día que nos conocimos, y esta historia lo cuenta. Pero mi vida empezó el año pasado, segundo año en el instituto. Ese verano la vi y me dije: “Pronto será mi esposa”


Verano de 1977, El Bronx, Nueva York.

El calor es tan intenso que casi puede freírse beicon sobre el capot de los Cadillacs. La goma de los neumáticos del resto de los coches de más baja gama en comparación con los "caddies" puede olerse derritiéndose sobre el asfalto. Este no distingue de marcas ni clases. Las suelas de las zapatillas "Puma" arden sobre él de la misma forma que las de las zapatillas de imitación. Los clubs de música disco están cerrados a la espera de volver a la vida tras la puesta del tirano sol. Los chicos negros caminan sobre la acera con sus pantalones acampanados y sus camisas de cuellos imposibles, las chicas lo hacen con pantalones cortos pegados a la piel y blusas abiertas.



Finales de la década de los 70 y el barrio casi parece una zona desmilitarizada, en ruinas, olvidada de las grandes y pretenciosas fuerzas vivas de la gran manzana.
Chicos y chicas han de saltar sobre basura y cascotes de edificios para llegar al instituto y conseguir una educación que los saque de allí. Y a pesar de ello…aman su barrio. Lo veneran y lo defenderán a muerte, pero son lo suficientemente inteligentes para saber que el futuro está más allá de los solares vacíos, fuera de ese barrio que cada verano parece estar mas cerca del sol. Bien lejos de ese mundo donde los caseros pagan a las bandas para quemar edificios y cobrar el seguro.







Este verano en el barrio el tiempo parece caminar más despacio, como un reloj sumergido en melaza. Ezequiel, al que todos conocen como "Zeke", mira por la ventana del apartamento donde tras la muerte de sus padres fue acogido por su tía y el nuevo novio de esta. El metro pasa frente  a él sobre un paso elevado. Los vagones están repletos de grafitis...y de entre todos ellos uno destaca: "The Get Down" reza. "Zeke" tiene una libreta en la mano con el nuevo poema que ha escrito y comienza a recitarlo con su imagen reflejada en el cristal de la ventana. Este está dedicado a Mylene, la hija del Pastor Ramón Cruz con la que comparte escenario en la congregación de su padre. Él toca el piano mientras ella canta alabando a Dios.  "Mylene, mi dulce reina, Mylene..." la chica por la que suspira y con la que graba canciones "no sacras" en cassettes en cuanto el pastor Cruz no sale de la iglesia. Su voz es "como acariciar terciopelo" y sueña con triunfar en la música. Él tan solo la quiere a ella.





"ZEKE" (JUSTICE SMITH)





MYLENE (HERIZEN GUARDIOLA)





"Zeke" sale del apartamento y se pierde  la visión de otro grafiti sobre un vagón del metro: “Donde hay ruinas, hay la esperanza de un tesoro”.
Las calles de El Bronx, arterias por las que corren pandilleros, drogas y pobreza, necesitan medios de evasión, eso lo saben bien "Zeke" y sus tres amigos, "Dizzee", "Ra-Ra" y "Boo-Boo", tres hermanos cuyos padres poseen una peluquería en el barrio. La evasión llega mediante las rimas de los poemas de "Zeke", el arte del spray de "Dizzee", que firma sus grafitis como "Rumi" y naturalmente a través de la música. A finales de la década de los 70 la música disco es la nueva fe. Una religión que se practica en clubs y discotecas.

Es la era de los DJ`s y si la música disco es la nueva religión ellos son los nuevos sacerdotes cuya misa se oficia al ritmo de Dona Summer, Earth Wind and Fire o The Trammps....











Nuestros jóvenes protagonistas pronto averiguaran que el poder de los DJ´s va mucho mas allá de lo que creían. Una leyenda del barrio, un misterioso y afamado grafitero que se hace llamar "Shaolín Fantastic" ("el negro de las pumas rojas inmaculadas") se cruza en sus vidas por avatares del destino. Este les contará que El Bronx no solo tiene pandilleros al uso. El barrio está dividido en tres reinos y cada uno de ellos pertenece a un DJ al que siguen y defienden sus "súbditos" como si de un nuevo mesías se tratara....


"Shao" quiere dejar el arte del spray y convertirse en DJ y para ello no solo necesita el permiso de su "rey", el conocido "Grandmaster Flash", sino que este debe mostrarle antes el camino enseñándole como conseguir el "GET DOWN" sobre los platos de discos y el mezclador de sonidos (NOTA: Explicación al final de la crítica).

Además, un futuro rey necesita un séquito que le ayude a serlo...y por supuesto un letrista que sepa rimar. La respuesta de "Zeke" y sus amigos alterará cada uno de los futuros días de la pandilla...

Y hará que la historia de la música cambie por siempre y jamás.
DE IZQUIERDA A DERECHA, "RA-RA", "ZEKE", "BOO-BOO", "SHAO" Y "DIZZEE"


Baz Luhrmann, director de películas como...como...un momento...perdonad un momento. Permitidme hacer un poco de META BLOG...¿Yo por qué no me llamo Shaolin Fantastic? ¿Por qué no Grandmaster Flash? Dios mío ¡hasta ahora mis nombres favoritos eran Michael Donovan, John McLane, Jack Burton o Ferris Bueller..! Que maravilla. Y que pena a la vez, para que luego digan que somos muy pesados con la nostalgia:
"Hola soy David Guetta..." ¿David Guetta?¿David Guetta?..Vete a tu pueblo hombre, vete a tu pueblo...¿Qué clase de nombre de DJ es ese, por favor? Y no me hagáis hablar de Chimo Bayo que me enciendo...
Bueno, ejem...ya estoy mejor...Continuo.



Baz Luhrmann, director de películas como "Romeo + Julieta", "Moulin Rouge", "Australia" y el remake de "El Gran Gatsby" ha decidido darse un paseo por la televisión por obra y gracia de Netflix. Y vaya paseo.  Luhrmann, al que muchos han considerado como "excesivo" y con tendencias a la saturación de imágenes próximas al barroquismo, ha creado  una gran historia de amor junto al guionista Shawn Ryan ("The Shield")


Es una gran historia de amor que abraza a otra más pequeña. Esta última es la historia entre "Zeke" y Mylene, un amor propio de adolescentes y carente de la intensidad que se profesaban  por ejemplo Ewan McGregor y Nicole Kidman en "Moulin Rouge". Y es que lo importante es la otra historia, la grande, la del amor por la música.

Esta está presente incluso cuando no lo está, no solo porque los temas de los 70 que te hacen tararear en tu sofá y mover los pies se te hayan clavado dentro y sigan reverberando en tu mente minutos después. Sientes la música en las conversaciones de los personajes, en sus peinados afros, los cuellos de las camisas o los pantalones de campana. Porque eso sí, la estética y la ambientación es perfecta, nada raro en Baz Luhrmann tras ver cualquiera de sus películas anteriores.
BAZ LUHRMANN

En cuanto al reparto, Luhrmann ha contado con la presencia de dos veteranos actores secundarios muy conocidos por nosotros: Jimmy Smits (Francisco "Papa Fuerte" Cruz, conocido por la mítica serie "La Ley de Los Ángeles"y "Dexter") y Giancarlo Espósito (Pastor Ramón Cruz, hermano del anterior, padre de Mylene y mundialmente conocido por su papel de  "Gus Fring" en "Breaking Bad").  Tal vez en algunos momentos de tensión a Jimmy Smits, un concejal cuyo trabajo bordea la ilegalidad, se le vaya un poquito la mano con la sobreactuación, pero nada que nos pueda "chirriar" demasiado.

En cambio Giancarlo Espósito cumple perfectamente con su registro de pastor estricto y cuyo afán por la rectitud le lleva a enfrentarse, en ocasiones violentamente, con su hija Mylene y sus sueños por conquistar el mundo de la canción. Otro secundario a tener en cuenta es Jaden Smith ("Dizzee") el "hijísimo" de Will Smith que interpreta a uno de los tres hermanos amigos de "Zeke". Su actuación merece un capitulo aparte mas abajo de esta entrada. Respecto a los dos jóvenes protagonistas, Justice Smith, ("Zeke") y la guapísima Herizen Guardiola (Mylene), tal vez les falte aplicar algo más de carisma a sus personajes, algo que se extiende al resto de sus jóvenes compañeros de reparto.
PASTOR RAMÓN CRUZ (GIANCARLO ESPÓSITO)

FERNANDO "PAPA FUERTE" CRUZ (JIMMY SMITS)

Hablamos de una serie que nos cuenta la vida de unos chicos pobres sometidos a la tiranía de la pobreza de un barrio que agoniza y que se desarrolla en una etapa que supuso una revolución musical. Se nos habla acerca de como funcionaban las discográficas, cercanas a ser familias mafiosas (dudo que viendo el panorama actual esto haya cambiado mucho) y de como los "pinchadiscos" mandaban mas que ellas mismas, pues si un tema creado por un grupo nobel, que jamás pasó por la radio,  reventaba las pistas de baile este pasaba inmediatamente a las listas de éxitos. Era entonces cuando aparecían el dinero y los contratos discográficos.


Hay una mitología aquí. Tenemos "reyes" cercanos a la divinidad, seres malvados que dirigen clubs y discotecas financiados por las drogas, hay héroes que "tan solo" quieren conquistar los cielos, tramposos piratas como el personaje de  "King of Cassettes" y batallas multitudinarias que usan las palabras y la música como lanzas, espadas y flechas.
Y luego están ellos, "Zeke", sus amigos y Shaolin "Shao" Fantastic, y...no lo saben, ellos no son conscientes de lo que están haciendo. Vibran, bailan, "Zeke" compone sus rimas, "Shao" pincha...Pero tú SI sabes lo que están creando. Los oyes y tu vello se eriza. Casi puedes sentir como la rotación de la tierra se invierte cada vez que ensayan o actúan en público. Y es que la banda sonora es espectacular, no solo por los temas míticos setenteros sino por la propia música de los "Cuatro fantásticos + uno" (que es como se hacen llamar en un principio) y los versos de "Zeke". Compra obligada de la BSO.
A estas alturas os estaréis preguntando si estamos hablando de un "musical", género que Luhrmann obviamente adora. Personalmente considero que existen dos tipos de musicales. El que primero nos viene a la mente es ese en el que los personajes hablan entre ellos cantando y 100 personas se ponen a bailar al ritmo de la canción.  Y el segundo es este, cuando la música está "justificada" e integrada en la historia sin  necesidad de lo anteriormente mencionado.

No se que opinarán los mas puristas del género, pero para mi si es blanco, hace "cuack", tiene pico y Disney tiene uno llamado Donald...es un musical...digo...un pato.
La estructura de los episodios es siempre es la misma, lo que no le resta originalidad. ¡En absoluto! Hasta la fecha estábamos acostumbrados a ver que en el inicio de algunas de nuestras series favoritas  unas imágenes nos recordaban lo que habíamos visto en el episodio anterior o lo que veríamos a continuación. Aquí no sucede esto. Al comienzo de cada uno de los seis capítulos volvemos al Garden en 1996 donde "Mr. Books" nos "rapea" acerca de lo ocurrido o lo que va a sucededer. Un valor este que convierte a Baz Luhrmann en un director que "piensa" y reinventa lo establecido. Como ese metro que transita por el paso elevado...En cada capítulo una frase "grafiteada" aparece ante nosotros como si fuéramos el propio "Zeke" mirando a través de la ventana del apartamento de su tía. Dos de ellas se han quedado grabadas para siempre en mi mente:  "Levanta tus palabras, no tu voz" y por supuesto "Donde hay ruinas, hay la esperanza de un tesoro”.

Esta frase es claramente el leitmotiv de la serie. No hay definición mejor que la de "ruinas" para El Bronx de 1977  y la de "tesoro" para el don que guardan dentro de sí un grupo de adolescentes y la gran oportunidad que tienen ante ellos.

Una primera temporada de 12 episodios (de momento), dividida en dos partes cuyos primeros seis capítulos podéis disfrutar ya en Netflix. Los últimos seis se han anunciado ya para el 2017 (¿falta mucho?)
LO MEJOR
 .La historia, la estética y ambientación son sublimes. Luhrmann nos coloca imágenes de archivo reales y si no fuera por el "grano" de las mismas no sabríamos cual pertenece a la serie y cual no. No en vano estamos hablando de la producción mas cara de Netflix, que poco a poco se está convirtiendo en la piedra angular de nuestras sesiones televisivas, a la espera de la llegada a España de la HBO.


.La música, un personaje constantemente presente y que se te mete en la sangre como un virus y no hay anticuerpo que lo elimine. Baz Luhrmann ha viajado en el tiempo llevando nuestra nostalgia ochentera una década mas atrás como diciendo "Hey...que antes estaba esto..." Éramos unos críos durante los 70 y nuestras referencias  han sido a posteriori , ya sea por el cine, "Fiebre del sábado noche" o por escuchar esos revival que se marcaban nuestros padres a base de vinilos y cassettes.

.Los versos de "Zeke" y sus "Cuatro fantásticos mas uno"... y ese uno es "Shaolin Fantastic", haciendo scratching en el doble plato de discos, mezclando sonidos y sudando como si estuviera picando piedra. Lejos de contaros el final del último episodio, me basta con deciros que si ese capítulo lo hubiera visto en una cinta de VHS, cinta y reproductor habrían acabado ardiendo. Rebobinar 15.000 veces puede afectar al estado físico de tu sistema de video.
.Y claro, ya habréis visto quien aparece en esta serie, el bueno de Jaden Smith...¿Qué le habrá dicho Luhrmann a este muchacho, el niño de Will Smith, para que su presencia y actuación no solo no moleste, sino que te interese su arte con el grafiti y su pelazo afro? Eso sí, la cara de pasmo no hay dios en el Olimpo que se la quite, pero aun así se sobrelleva.
.Corrupción política, amor, música, barrios marginales, bandas callejeras, droga, discotecas de las de verdad....Hacía muchiiiiisimo tiempo que no terminaba una serie, ya fuera más larga o más corta, y volvía a ponerla  desde el principio. La segunda vez pasé mas tiempo de pie bailando que en el sofá, porque no lo sabéis... pero soy un consumado bailarín.
.Durante el rodaje el director contó con el apoyo y consejo de tres de los partícipes de aquella revolución musical, "Africa Bambaataa", "Grandmaster Flash", y "Dj Kool Herc". Cada uno de ellos tiene a su alter ego haciendo "scratching" en la serie. 
.En algunos momentos hay una película que está presente. ¿Sabéis cual? ¿No? ¿Qué obra maestra se estrenó en 1977? Cada vez que aparece su titulo por boca de uno de los personajes tus ojos  aumentaran tres tallas más.
.Genial el episodio que habla del famoso apagón de Nueva York y todo lo que sucedió aquellos días.
.Mucho mas disfrutable en versión original subtitulada.
LO PEOR
.Anteriormente comentaba que Baz Luhrman es considerado como "excesivo" en su puesta en escena y conocido por usar en ocasiones la cámara como si esta estuviera en un estado febril y "espídico". Pues eso es precisamente lo que echo de menos. Él dirige tan solo el primer episodio, pero a pesar de ello, se notan sus huellas a lo largo de toda la serie. Mas presentes en el inicio de la temporada, por supuesto, pero es obvio que permaneció sentado muy cerquita de la silla del director aunque no la ocupase, esto se nota sobre todo en las escenas de  discotecas y clubs.
.He leído críticas sobre esta serie que la definen como una suerte de "West Side Story" con hip hop. Esto es absurdo hasta decir basta. Desconozco si esas personas han visto realmente ese maravilloso musical de Robert Wise con la música de Leonard Bernstein, o si han hecho lo propio con "The Get Down", pero esa afirmación es una titánica y soberana estupidez. "West Side Story" es "Romeo y Julieta" llevada a las calles del Nueva York de los 60 con los Montesco y Capuleto convertidos en bandas callejeras rivales.
El amor entre "Zeke" y Mylene poco tiene que ver con aquel que sentían "María" y "Tony" en la obra de Robert Wise. Aquí nadie ha prohibido el amor que sienten el uno por el otro, ni hay familias enfrentadas por ello. La historia de ambos carece de esa intensidad y hasta el momento que escribo esto no sé si se trata de un error del creador de la serie o una decisión para no eclipsar a la verdadera historia. Y ojo, no digo que dos adolescentes  no puedan sentir un amor tan intenso como todas las historias que conocemos. Yo una vez fui adolescente, lo sé porque tengo fotos que lo prueban, y sé lo que sentí cuando me enamoré. Pero eso no se ve aquí...¿intencionado o error? Veamos el último punto.
.Aquí falta algo más de carisma en todos los personajes, todos ellos tienen su momento en la serie, haciendo más hincapié en "Zeke" y Mylene, los verdaderos protagonistas. El siguiente sería "Dizzee" (Jaden Smith) el artista del grafiti, pero a estas alturas pedir carisma a Jaden Smith (a pesar de que como he dicho no molesta) es pedir peras al olmo. Uno siente que los personajes podrían dar mas de sí, poseer mas claroscuros en su interior habida cuenta de todo lo que están viviendo y "donde" lo están viviendo.
CONCLUSIÓN
"The Get Down" es una serie que hay que ver. Te guste la música de los 70 o no, te guste el hip hop o no, es indiferente. Basta con que seas capaz de "sentir" algo cuando una determinada canción suena y tus pies adquieren voluntad propia. Baz Luhrmann ha llegado a la anteriormente conocida como "pequeña pantalla" y lo ha hecho a lo grande...y eso hay que verlo.


Y si no saltas como un loco del sofá en el último capítulo, sintiéndote capaz de doblar vigas de hierro con tus propias manos...tienes un problema. Nada mas, espero hacerme con unos pantalones de campana para el estreno en el 2017 de los siguientes seis capítulos de esta primera temporada...
"Lo importante es la música. La música es el único motivo. Te hará avanzar y abrir puertas que según los demás están cerradas. Te dará el puto mundo gratis si la amas, si la abrazas sin reservas..."
-Grandmaster Flash-

Ah, perdón, lo olvidaba. Os dije que iba a explicaros que es eso del "GET DOWN". Veréis, pues resulta que cuando tienes dos platos de discos y una mesa de mezclas, tienes que.....

Norberto Piñar ALIAS "Big Witcher Fire"
@Ikarubi


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